II Bizkaia Chess&Gazte

Nos vamos a acordar mucho tiempo de este fin de semana. Gran parte de la chavalada del CDA Lapuerta y amigos de otros clubes de la Región, con algunos padres y madres, han hecho cerca de 1.700 kilómetros para hermanarse con el Club Ajedrez Santurtzi y participar en el II Bizkaia Chess&Gazte, un evento que busca promocionar el ajedrez y que ya dejó el listón bien alto el año pasado, en su primera edición, en cuanto a participación y proyección.

El tiempo nos ha acompañado. Pese a que la lluvia no podía faltar, tuvimos ocasión de visitar Bilbao y ver las dos catedrales, la del fútbol, donde el Athletic escribe su historia, y la del casco antiguo, donde también paseamos por sus calles, en las que da gusto perderse. Además, probamos los pintxos, para que no falte el disfrute de la gastronomía vasca... y vaya si mereció la pena, ¡qué delicias!

El viernes por la tarde, los amigos de Santurtzi nos acogieron en su sede del Polideportivo. Buenas instalaciones, bien pensadas y bien preparadas para practicar muchos deportes. Allí celebramos el encuentro con unas partidas amistosas, mientras recibíamos de regalo picoteo y zumos, a modo de merienda, que nos vino muy bien. Vaya desde aquí, de nuevo, nuestro agradecimiento al Club Ajedrez Santurtzi, por el esfuerzo que ha hecho posibles estos buenos momentos.

El II Bizkaia Chess&Gazte se celebraba el sábado en Barakaldo y tuvo gran cobertura de los medios de comunicación, como Eitb (clic aquí para verlo) y Tve, con algunos de los nuestros como protagonistas:

Desde hinchables hasta charlas sobre las matemáticas y el ajedrez, gran variedad de actividades acompañaron durante todo el día el juego. Entre ellas, una de las destacadas sin duda fue el ajedrez viviente, con el que Abel y Josito supieron despertar la atención especialmente de los más pequeños.

Al final, nuestra expedición recogió seis premios, ¡enhorabuena! También desempeñaron un gran papel los prebenjamines y benjamines, aunque por su edad las partidas no tenían carácter de competición.

A lo mejor cuesta creerlo, pero a muchos el autobús no se nos hizo largo. Aunque fueron más de veinte horas, la buena compañía y la alegría que dominaba el ambiente pudo más que el cansancio. El micrófono de Abel y el cumple de Rebeca ¡felicidades!, a la que nadie consiguió sonsacar qué regalo le gustaba más, pusieron la guinda.

Nos vamos a acordar mucho tiempo de este fin de semana, vaya que sí. El vídeo que os dejo tiene imágenes de toda la escapada. Espero que os guste.